VIAJEMOS JUNTOS A SUDÁFRICA... DESDE ACÁ...

miércoles, 30 de junio de 2010

Villa el nuevo Héroe Español




Con una actuación a tono con las expectativas previas, España derrotó 1-0 a Portugal en el partido por los octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010, disputado el 29 de junio en Ciudad del Cabo. Los ibéricos fueron pacientes, manejaron el balón con mucho criterio y anotaron en el momento justo.
España echó en el terreno, de entrada mismo, sus intenciones de ir en búsqueda del partido. Y en los 6 minutos tuvo 3 ocasiones de anotar, desarrollando la misma jugada: desbordes por el andarivel izquierdo y remates al arco en la puerta del área. Fueron 2 de David Villa y una de Fernando Torres, que fueron controladas por Eduardo.
Los campeones de Europa se movieron rápido y se aproximaron de manera constante al arco lusitano, con mucha paciencia aunque sin la pericia necesaria para romper el cero. Y los portugueses, de a poco, se plantaron de manera sólida y construyeron una auténtica muralla que impidió las pretensiones ibéricas.
Pese a controlar y hacer circular la bola, España no pudo plasmar esa situación en el tanteador y Portugal se aproximó con dos cabezazos, uno de Raúl Meireles y otro de Tiago, que se fueron desviados.
Con verdadera furia
La parte complementaria comenzó con el mismo planteo de ambos equipos. Una España que dominaba el esférico y Portugal bien armado, preparado para el contragolpe. Así fue como los lusitanos tuvieron la primera ocasión en un desborde de Hugo Almeida que rebotó en Carles Puyol y salió cerca del poste izquierdo de Iker Casillas.
A los 60’, la Furia adelantó lo que sería de ahí en más la tónica del encuentro. Tras un centro de Sergio Ramos, Fernando Llorente cabeceó una pelota que Eduardo desvió de manera espectacular. Un minuto después, Villa remató de afuera del área y la bola picó a centímetros del palo izquierdo del guardameta.
De tanto ir, los de camiseta roja lograron desnivelar: luego de un pase en cortada preciso de Andrés Iniesta, Villa quedó solo para definir, rechazó el arquero y tras el rebote el Guaje empujó el Jabulani a la red (1-0, 63’). Fue el primer tanto que recibió Portugal en el certamen.
De ahí en más, España desplegó un concierto de toques y juego asociado que apabulló a los dirigidos por Carlos Queiroz, que no pudieron hacerse de la pelota y se vieron impotentes ante el marcado dominio español.
Los campeones europeos hasta pudieron aumentar con dos llegadas, una de Ramos, que remató y exigió a Eduardo y otra de Llorente, quien cabeceó apenas desviado. Para colmo de males, los lusitanos sufrieron la expulsión de Ricardo Costa, a poco del final. Poco quedó entonces y, más allá de algunos raptos aislados de Portugal, los ibéricos consolidaron la victoria.
España, que accedió a los cuartos de final de la Copa Mundial de la FIFA tras 8 años, se enfrentará con Paraguay el 3 de julio a las 20:30 en el Estadio Ellis Park de Johannesburgo.

martes, 29 de junio de 2010

Paraguay hace Historia de la mano del Tata Martino





La selección de Paraguay se impuso a su similar de Japón por 5-3 en la definición por penales y clasificó por primera vez en su historia para los cuartos de final de la Copa Mundial de la FIFA. Los guaraníes, que habían igualado 0-0 en tiempo reglamentario, debieron sufrir más de lo esperado para dejar atrás a un valiente conjunto nipón que vendió cara la derrota el 29 de junio en Tshwane/Pretoria.

Japón salió dispuesto a mostrar los dientes en campo rival. Así, cuando no había transcurrido ni un minuto de juego, Yoshito Okubo se aproximó al área de Justo Villar y remató potente pero desviado. Era un aviso de los nipones, que lejos estuvieron de amedrentarse ante el potencial exhibido por los guaraníes en la fase de grupos.

Los de Gerardo Martino demoraron en acomodarse en el campo pero, cuando lo hicieron, llevaron peligro. Lucas Barrios construyó una buena maniobra por izquierda y exigió a Eiji Kawashima con pierna derecha. La respuesta no tardó en llegar: Daisuke Matsui tomó una bola muerta desde fuera del área e hizo temblar el travesaño con un derechazo medido.

La Albirroja contó con una opción más antes del descanso cuando Roque Santa Cruz midió mal su remate dentro del área, en una jugada confusa tras un tiro de esquina. Fue la última situación emotiva en esa primera mitad.

La situación no cambió en el complemento: muchos nervios y pocas ideas. Martino intentó ganar peso en ofensiva con el ingreso de Nelson Haedo Valdez, pero el delantero no estuvo fino. De hecho, apenas minutos después de la entrada del delantero, fue Marcus Tulio Tanaka el que aproximó peligro con un buen cabezazo que se perdió afuera.

Los nervios y el miedo al error ganaron terreno en Tshwane/Pretoria, por lo que los últimos minutos de la segunda mitad se fueron entre fricciones, pases malogrados y poco tránsito en las áreas. Apenas un centro que cerca estuvo Tanaka de conectar despertó algo de emoción en los aficionados. Nos íbamos al tiempo extra…

Despertar tardío


Todo lo que no pudieron producir en el tiempo reglamentario llegó en el alargue. Barrios avisó rápidamente con un cabezazo que fue a parar a las manos de Kawashima. El portero se mostró atento para ganarle otro duelo a Nelson Haedo, aunque contó con un poco de fortuna en un toque desviado del ingresado Edgar Barreto.

Por el contrario, Villar debió esforzarse minutos antes para repeler un buscapié venenoso de Honda. Sería la última emoción antes de los penales. En la definición, la primera del certamen, los guaraníes estuvieron infalibles mientras que Yuichi Komano estrelló su remate en el travesaño.

Paraguay avanza así a cuartos de final, donde espera el próximo 3 de julio en Johannesburgo al vencedor del cruce entre España y Portugal.

En Chile quieren que siga Bielsa



Harold Mayne-Nicholls, presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile, expresó su deseo de seguir contando con el argentino Marcelo Bielsa como entrenador de la selección chilena "para seguir creciendo en este proyecto".

"Vamos a buscar la fecha adecuada para conversar, no hay una obligación inmediata, hay que darse el tiempo para trabajar bien", dijo Mayne-Nicholls ayer, horas después de que la selección chilena cayera 0-3 ante Brasil en los octavos de final del Mundial de Sudáfrica, según reportó la agencia italiana Ansa.

Tras el partido, y ante reiteradas preguntas, Bielsa dijo que no era el momento para hablar sobre su continuidad al mando de la selección chilena. Algunas fuentes indican que tiene una millonaria oferta de la federación mexicana de fútbol.

"Me gustaría que si cambiamos los estatutos de la federación (Bielsa) siga hasta la Copa América de 2015", dijo Mayne-Nicholls.

"Queremos presentarle un proyecto donde él sea parte importante, que él se identifique con lo que nosotros queremos y que le permita un crecimiento profesional y a nosotros nos permita un desarrollo del fútbol chileno, sobre todo en la parte técnica", detalló.

El dirigente recordó que "tuvimos fe en convencerlo en agosto de 2007 cuando no teníamos nada. Ahora que nos conoce a nosotros, a nuestros jugadores, es evidente que la confianza es mayor, pero él puede tener alternativas mejores".

"Lo más importante de Bielsa fue que lo que le pedimos lo cumplió muy rápido: mucha disciplina con los jugadores, rigor en el trabajo y eso lo cumplió plenamente", concluyó.

Soberbia actuación de la Verde Amarella



Con una actuación convincente y fiel a su estilo histórico, Brasil derrotó a Chile en el encuentro por octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica disputado el 28 de junio en el Estadio Ellis Park de Johannesburgo.

Las selecciones sudamericanas se conocen bien y mostraron mesura y respeto desde el inicio. Chile impuso su acostumbrada presión, imposibilitó el circuito ofensivo brasileño y quedó preparado para un contragolpe como para tratar de desnivelar el tanteador.

Con el correr de los minutos, ninguno pateó con peligrosidad a las vallas pero fue Brasil el que utilizó las bandas para acercarse a la portería defendida por Claudio Bravo. Y en uno de esos avances, tras un tiro de esquina, Juan cabeceó limpio para batir al guardameta (1-0, 34’).

Los pentacampeones lograron abrir el encuentro y rápidamente estiraron la ventaja en una precisa acción en la que Kaká habilitó a Luis Fabiano, quien eludió a Bravo y anotó la segunda diana (2-0, 38’).

La Roja intentó salir pero no encontró la vía para llegar hacia el área de Julio César y se vio impotente ante un Brasil sólido en todas sus líneas.

Con el peso de la historia


El complemento permitió ver a la mejor versión de la Canarinha en Sudáfrica 2010. Los dirigidos por Dunga hicieron circular el balón y manejaron las acciones, apoyados por una lúcida seguridad defensiva.

En una maniobra rápida, Ramires dejó a varios adversarios fuera de combate y asistió a Robinho, que definió al palo izquierdo del guardameta (3-0, 59).

Chile, con desesperación y algo desordenado, soportó los avances brasileños y dispuso de un par de situaciones en los pies de Humberto Suazo, una de ellas desviada por Julio César y otra en una volea que dio en el travesaño.

Brasil, cómodo en el campo y aceitado en sus movimientos, asfixió al rival y hasta pudo volver a anotar, en una jugada de Robinho que sacó Bravo al córner.

En los últimos minutos, la verdeamarela controló la pelota, disparó en varias oportunidades a portería aunque sin ocasionar riesgo y saboreó un triunfo que le permite seguir en camino en la competición.

Los pentacampeones, que accedieron a cuartos de final de la Copa Mundial de la FIFA por quinta vez consecutiva, se medirán con Países Bajos el 2 de julio a las 16:00 en el Estadio Bahía Nelson Mandela/Puerto Elizabeth.

La naranja mecánica sigue en marcha


Con otra sólida actuación, Países Bajos derrotó a Eslovaquia por 2-1 y se clasificó para disputar los cuartos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010. Los neerlandeses, que avanzaron a esta instancia por quinta vez en su historia, esperan ahora el ganador de Brasil - Chile. El partido se disputó este lunes 28 de junio en el Estadio Durban de la ciudad homónima.

Ambos salieron a jugar el primer tiempo pensando en el arco de enfrente, aunque cerrando filas de mitad de cancha para atrás, por lo cual no dieron muchos espacios para los ataques rivales. He allí porque en los diez minutos iniciales el encuentro se pareció a un “tiro al blanco”, con varios intentos de media distancia sin resultados satisfactorios.

Países Bajos empezó a marcar la diferencia con un par de encuentros entre Wesley Sneijder y Arjen Robben, quien fue titular por primera vez en el torneo. A los 11’ avisó por intermedio de Robin Van Persie, pero Jan Mucha le ahogó el festejo con una gran atajada.

Sin embargo, poco pudo hacer el arquero cuando Robben recibió un largo pase al vacío de Sneijder y, luego de avanzar varios metros por derecha, enganchó para adentro y sacó un zurdazo raso y recto que entró junto a un poste (1-0, 18’).

Si bien los Oranje intentaron no ceder la iniciativa, casi sin querer levantaron el pie del acelerador, aunque Eslovaquia no supo aprovechar la situación. Si bien intentó generar juego a partir del criterioso Marek Hamsik, la falta de un interlocutor para el 10 derivó en el abuso de balones largos, siempre devueltos por la defensa holandesa.

Sólido y certero


Países Bajos pareció recuperar aquel andar seguro en el arranque complemento gracias a los destellos de Robben, aunque chocó otra vez la figura de Mucha, quien en menos de un minuto y a puro reflejo, le ahogó los festejos al mismo Robben (50’) y a Van Persie (51’).

Sin embargo, las manos de su arquero parecieron despertar a Eslovaquia, que mostró más decisión. Dos veces acarició la igualdad, pero Maarten Stekelenburg se lució al desviar brillantemente remates consecutivos de Miroslav Stoch (67’) y  Robert Vittek (68’).

Los eslovacos pagarían caro tanto el no aprovechar su momento como el único error de Mucha, quien quedó mitad de camino en un pelotazo frontal y se dejó anticipar de cabeza por Dirk Kuyt; el volante controló el balón y centró atrás para Sneijder, que a la carrera anotó el segundo (2-0, 84’).

A pesar de la diferencia, Eslovaquia sacó a relucir su orgullo y tuvo su recompensa en el tiempo de descuento a través de Vittek, quien de penal marcó el tanto del honor (2-1, 90’+4’). El árbitro pitó el final tras la ejecución, dando así rienda suelta al festejo holandés, que desde Francia 1998 no se metía entre los ocho mejores del mundo.

domingo, 27 de junio de 2010

"Ahora voy por el doble o nada", prometió Messi



El delantero del seleccionado argentino Lionel Messi lamentó no haber convertido su primer gol en la Copa del Mundo durante la victoria frente a México, sin embargo prometió dos tantos contra Alemania, por los cuartos de final.

“Sigo sin poder convertir. Perdí la apuesta con Diego (Maradona) pero ahora voy por el doble o nada contra Alemania”, aseguró Messi después del triunfo ante los dirigidos por Javier Aguirre.

El mejor jugador del mundo analizó que México “es un equipo que manejó bien la pelota, por suerte cuando se nos abrió el partido lo pudimos manejar”.

Sobre el primer gol de la Selección, el jugador del Barcelona reconoció que “en un momento se pensó que lo habían anulado, pero por suerte lo cobró y sirvió para comenzar a ganar el partido”.

También se refirió al próximo rival Alemania, por los cuartos de final del mundial, que será una revancha por la eliminación en Alemania 2006 en la misma instancia.

“Será un rival complicado, tienen buenos jugadores y ya nos conocemos porque ellos tienen la misma base que hace cuatro años”, concluyó.

"Ganamos un partido Chivo"











El entrenador del seleccionado argentino de fútbol, Diego Maradona, comentó hoy que “ganamos un partido chivo, donde había mucha tensión, gracias a la contundencia que tuvimos”.

“Los dos nos conocíamos bien pero Argentina fue superior durante los 90 minutos y no pasamos sobresaltos. Tuvimos contundencia y supimos resolver el esquema que nos plantearon”, destacó Maradona.

Y agregó: “Mis jugadores están haciendo bien las cosas, y por eso quiero felicitarlos. Hoy ganamos ante un buen rival que había hecho méritos para llegar a los octavos de final”.

“Todo lo que estudiamos de México, pasó. Hace una semana dije que Rafa Márquez iba a jugar de central pero no le dio resultado porque tenemos jugadores muy rápidos, entre ellos a Messi, que es un avión”, señaló Diego.

Con respecto, a los futbolistas que se quedaron afuera del partido, Maradona dijo que “mi relación con los muchachos está bárbara. Acá no hay titulares y suplentes. Juega el que está mejor”.

Y añadió: “En el mundial no podés dar ventaja. Mirá que dejé afuera a pesos pesados y cuando tienen que saltar a la cancha lo hacen por respeto al grupo, al cuerpo técnico y a la camiseta”.

Al ser consultado por Alemania, Maradona pidió que primero le dejen disfrutar “este triunfo contra México. Ya va a haber tiempo de hablar de los alemanes”.

Por otra parte, Maradona se volvió a quejar de los golpes que recibe Lionel Messi.

“La figura de la cancha hoy fue la advertencia. A Messi le viven pegando. Cuando encara, los rivales no miran la pelota, directamente le apunta a la pierna izquierda o la derecha”.

Al volver sobre las claves del triunfo, Maradona dijo que fue clave “aprovechar los errores que ellos cometieron” y destacó nuevamente la contundencia.

Y también se refirió a lo que no le gustó del equipo: “En el segundo tiempo le regalamos la pelota y eso no me gustó porque si no eso no hubiera pasado podríamos haber sacado una diferencia mayor”.

México dudó y la aplanadora aceleró




Argentina clasificó para los cuartos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 tras derrotar a México por 3-1 en el partido disputado en el estadio Soccer City de Johannesburgo el 27 de junio. Alemania, verdugo de Inglaterra, espera ya a la Albiceleste.

Ambos equipos se sacudieron bien rápido los nervios y se fueron a por el gol. El primero en entrar en acción fue Lionel Messi en su típico regate en la línea del área pero infructuoso. Luego fue Carlos Salcido quien, con un disparo desde tres cuartos de cancha, hizo temblar el larguero de Argentina. Tévez respondió con una internada pero quedó muy tapado para el remate, y la réplica fue de Andrés Guardado con un tiro cruzado que rozó la base del poste. ¡Y todo esto en dos minutos!

Tras un primer cuarto de hora de locura, los dos equipos templaron el ánimo y calmaron el ritmo. Llegó el toque y la tensión. Hasta que Messi vio el hueco en el centro de la defensa mexicana y habilitó a Tévez. El portero azteca llegó primero pero el rebote lo recibió la Pulga que volvió a asistir al Apache para que éste rematase de cabeza (1-0, 26’).

El gol dejó tocados a los mexicanos, que cuando estaban recomponiendo el ánimo, recibieron el segundo jarro de agua fría. Ricardo Osorio dejó un balón muerto en la frontal del área que recupera Gonzalo Higuaín para tumbar en un quiebro al portero, doblar la ventaja (2-0, 33’) y quedar como máximo goleador del torneo hasta la fecha.

Siguieron minutos complicados para México, que defendía como podía la insistencia de los argentinos. Y aunque Guardado y Javier Hernández se acercaron con peligro, no pudieron reducir distancias antes del descanso.

Arrancó el segundo tiempo con el mismo tono, Argentina cómoda sobre el campo y el Tri buscando por dónde entrar, y sin encontrar el modo. Tévez, vertical, incisivo y terriblemente molesto para la zaga azteca, se revolvió en la frontal hasta que se inspiró e inventó un tremendo remate desde la media luna que se coló por la escuadra (3-0, 52’).

Pablo Barrera, que entró de refresco en la segunda mitad, puso cierto picante al ataque de México. Fallaba la definición, y la suerte, como en el balón que Martín Demichelis sacó bajo palos (70’) tras un remate del propio Barrera. Pero Hernández levantó la moral azteca con un zurdazo que se coló entre Romero y el palo (3-1, 71’).

Todavía sacaría Gabriel Heinze un balón comprometido tras una falta. Argentina se echó atrás en la recta final, aguantando las intentonas mexicanas. Tampoco hoy llegó el gol de Messi, a pesar de su excelente remate en el tiempo añadido que Óscar Pérez sacó sobre el larguero.

Argentina recorre el mismo camino que en Alemania 2006 y tras superar a México en octavos enfrentará en cuartos de final a la selección germana el próximo sábado 3 de julio en Ciudad del Cabo.

Close: "Yo ya había visto algunos partidos buenos de mi selección"



Caras sonrientes en el vestuario alemán. Después del triunfo por 4-1 en octavos de final del tricampeón del mundo en la Copa Mundial de la FIFA 2010 contra su histórico rival inglés, los jóvenes pupilos del seleccionador Joachim Löw daban la impresión de estar en el séptimo cielo cuando los abordamos en los pasillos del estadio Free State de Mangaung/Bloemfontein. FIFA.com habló en exclusiva con el delantero Miroslav Klose y con el central Arne Friedrich sobre el principal motivo por el que se habían impuesto tan claramente en este vibrante duelo.

"Que hoy marcáramos la diferencia a nuestro favor se debió a varios factores", opinó Friedrich, para luego añadir: "Hemos actuado como un bloque, hemos jugado muy compactos durante los 90 minutos, y sobre todo estábamos en mejor forma. En la situación decisiva hemos sabido imponernos con fuerza". El defensa 76 veces internacional se mostró especialmente orgulloso de la desenvuelta actuación de su equipo. Al fin y al cabo, a sus 31 años, es uno de los veteranos de esta selección que este domingo por la tarde volvió a gozar con la creatividad a raudales de las jóvenes estrellas de su combinado, como el director de juego Mesut Özil y el volante Thomas Müller, autor de un doblete.

Una táctica rutilante


"Hay que tener en cuenta que Inglaterra debía ser considerada antes del partido claramente como el equipo más fuerte, por los grandes nombres que tiene en sus filas. Pero yo creo que nosotros hemos compensado con creces esa calidad con nuestro extraordinario espíritu de equipo", agregó Friedrich.

Klose estuvo de acuerdo. El delantero de 32 años se mostró tan correoso y combativo contra los Tres Leones como en la Copa Mundial de la FIFA 2006 en su propio país, y coronó su excepcional desempeño con el primer gol del encuentro, su número 50 en 99 comparecencias con Alemania. El circunspecto astro del Bayern de Múnich tenía muchos motivos para presumir de su fantástico rendimiento, pero se limitó a decir: "El principal factor de nuestra victoria fue el espíritu de equipo. Todos nos hemos dejado la piel por los demás, hemos tirado todos en el mismo sentido. Eso fue lo que inclinó la balanza".

Los 40.510 espectadores que presenciaron el partido de la segunda ronda han disfrutado de lo lindo con el ilusionante estilo ofensivo de la Mannschaft, técnicamente admirable en algunas fases del encuentro, así como con algunas brillantísimas acciones individuales de sus jugadores. Pero para Löw contaba algo muy distinto: "Yo ya había visto algunos buenos partidos de mi selección. Pero hoy nuestro joven equipo ha ofrecido sin duda una actuación grandiosa contra los expertos ingleses. En el plano táctico hemos estado sensacionales. Y no hemos querido entregar la plaza en ningún momento".

¿Sello de campeón?


Sin embargo, uno de los protagonistas mereció especial elogio. Thomas Müller, 20 años, demostró una vez más que es un talento juvenil fuera de serie. Una prueba de ello es que se ha encaramado con sus tres goles y tres asistencias hasta lo más alto de la tabla de goleadores del torneo sudafricano. "Tiene cualidades increíbles. Nunca se tensa; a pesar de su corta edad no muestra el más mínimo atisbo de nerviosismo. Tiene la facultad de aprovechar sin inmutarse las ocasiones que se le presentan, también en el área. Es fabuloso con qué sangre fría mete los goles", apuntó Löw en elogio del Jugador Budweiser del Partido.

Así las cosas, los alemanes parecen haber dejado muy atrás su bache en la fase de grupos. Ahora acaban de vencer a un gigante. Y por lo que hemos visto, los golpes de genio de sus jóvenes estrellas son armas muy poderosas. Además son capaces de funcionar como un engranaje perfectamente sincronizado, al que hay que añadir su cohesión y su combatividad característica. En suma, esta selección de Alemania tiene el instrumental característico de los campeones. Pero después del triunfo contra Inglaterra, Löw advirtió: "El próximo rival será aún más difícil, ya sea Argentina o México. Por eso no se nos puede colgar en absoluto la vitola de favorito".

Leyendas Alemanas en el clásico más antiguo

Si le preguntamos a cualquier aficionado al fútbol por el duelo entre Alemania e Inglaterra, comprobaremos cómo se le abren los ojos de la emoción, cómo sus gestos se vuelven más vehementes y el volumen de su voz aumenta cada vez más. Ningún otro enfrentamiento del planeta reúne más historias y leyendas que éste. El eterno clásico, la lucha por el prestigio, la madre de todas las rivalidades... Los sinónimos son infinitos, y antes de cada nuevo choque entre ambas selecciones se evocan multitud de recuerdos.

"Siempre son partidazos cargados de emoción, de los que no se olvidan en la vida. No existen los amistosos. Es cuestión de principios y de prestigio. Por eso no está permitido perder", señala Andreas Brehme, campeón del mundo con Alemania en 1990, en su intento por reflejar la trascendencia del próximo encuentro de octavos de final de Sudáfrica 2010 para FIFA.com.

El ex jugador de 49 años sabe muy bien lo que significa medirse a los Tres Leones. En la semifinal de la Copa Mundial de Italia 1990, fue precisamente él quien adelantó al combinado teutón en el marcador y, además, contuvo los nervios en la posterior tanda de penales. "Para mí, aquel fue el mejor partido del Mundial. En la final [contra Argentina] sólo hubo un equipo sobre el césped, y fue el nuestro. Podríamos haber jugado con once jugadores de campo", recuerda el autor del gol de la victoria en aquella final. "El Alemania-Inglaterra es todo un clásico".

La inolvidable final de la Copa Mundial de 1966 

Volvemos a escuchar el término clásico. Para Franz Beckenbauer, seleccionador germano en 1990, el duelo llega "demasiado pronto". Le dejamos que se explique: "Un enfrentamiento así debería producirse en semifinales, no en octavos de final. Siempre han sido los mejores partidos de nuestra historia, los más memorables. Sin duda, volveremos a presenciar una batalla futbolística extraordinaria. Es el encuentro europeo por antonomasia. Ahora empieza lo bueno de la Copa Mundial".

¿Pero de dónde viene la rivalidad entre ambas naciones? El Torpedero Gerd Müller ofrece su punto de vista en la página web del Bayern de Münich, fcbayern.de: "Sencillamente, es un clásico en el que la tensión puede cortarse con cuchillo. En mi época ya sucedía, y en la actualidad sigue siendo así. Yo marqué el gol de la victoria en cuartos de final en México 1970, entre otros. La verdad es que en aquel entonces, los ingleses apenas nos inquietaban y les ganábamos casi siempre. Luchaban como auténticos leones en cada partido, pero técnicamente no eran tan buenos".

Respecto a este tema, Lothar Matthäus, el jugador que más veces ha vestido la elástica alemana, ve una diferencia fundamental entre futbolistas y periodistas. "Desde luego que ha habido grandes duelos históricos contra Inglaterra: la semifinal de la Copa Mundial de 1990, o la semifinal de la Eurocopa de 1996. Tampoco podemos olvidar el gol de cabeza de Uwe Seelers en México 1970, o el legendario gol de Wembley en 1966. Pero los jugadores se concentran exclusivamente en el presente, mientras que los medios de comunicación prefieren repasar la historia".

Primer choque en 1908

A propósito de Seeler: el partido más recordado es, sin duda, la final de la Copa Mundial de 1966, en la que los Tres Leones conquistaron su primera corona mundialista con un triunfo por 4-2 en la prórroga gracias al desde entonces llamado "gol de Wembley". "El conjunto inglés ha cambiado muchísimo en las últimas décadas. No podemos comparar aquella generación campeona del 1966 con la selección actual", comenta Uwe Seeler con conocimiento de causa por haber sido uno de los delanteros alemanes en aquella contienda librada hace 44 años.

"Mantengo una relación muy buena con los ingleses, especialmente con los integrantes del equipo campeón del mundo en 1966, contra los que ya habíamos jugado un par de partidos benéficos. Hace poco estuve en Londres y fui a ver a Bobby Charlton. Fue un encuentro entrañable", nos desveló Uwe, quien a renglón seguido añadió sobre el actual combinado británico: "No es un conjunto tan potente como para infundir miedo. En los tres choques que ha disputado hasta ahora, no me ha convencido en absoluto. Es más, creo que han jugado muy mal. Su actuación en lo que va de torneo ha sido una verdadera decepción".

Alemania e Inglaterra se han enfrentado en 31 ocasiones, con un balance de 10 victorias, 6 empates y 15 derrotas para el bando teutón, y un total de 36 goles a favor y 66 en contra. En su primer duelo, celebrado el 20 de abril de 1908 en Berlín, los ingleses se impusieron por 1-5. La última vez que se vieron las caras fue el 19 de noviembre de 2008, de nuevo en Berlín, y los ingleses también vencieron por 1-2.

¿Tendrá razón Lineker?

¿Qué podemos esperar del 32º encuentro? "Una tanda de penales, ¿qué más se puede pedir?", bromeó el antiguo as de la portería alemana Oliver Kahn, en su entrevista exclusiva para FIFA.com. "Está por ver si los 'jóvenes fieras' de Joachim Löw tienen la madurez suficiente para imponerse a los británicos. Si consiguen aguantar hasta la tanda de penales, tendrán muchas posibilidades de alcanzar los cuartos de final".

Las leyendas del fútbol alemán, como Kahn, Brehme ("La balanza está al 50%, pero creo que Alemania ganará 2-1"), Beckenbauer ("La ventaja de Alemania es nuestra potencia") o Seeler ("Alemania está ante una gran oportunidad"), rebosan optimismo a pocas horas del partido de octavos de final que tendrá lugar en Bloemfontein.

En cualquier caso, hay algo seguro: este clásico eternamente joven escribirá un capítulo más el próximo domingo, día en el que comprobaremos la veracidad de una de las citas más famosas del balompié internacional. Como dijo en su día el inglés Gary Lineker: "El fútbol es un juego muy sencillo: 22 hombres corren detrás de un balón durante 90 minutos, y al final siempre gana Alemania".

Alemania bailó a Inglaterra



Con contundencia y pasajes de fútbol de alto vuelo, Alemania venció 4-1 a Inglaterra en el partido por los octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 disputado en el estadio Free State de Mangaung/Bloemfontein el 27 de junio. El encuentro tuvo ráfagas emocionantes, fue de ida y vuelta y evidenció un marcado dominio germano.

Ambas selecciones salieron al campo de juego con mucha cautela, ejerciendo presión en el medio campo. Esos primeros minutos, donde sólo hubo una acción de riesgo en los pies de Mesut Oezil, que sacó David James con los pies, de ninguna manera hacían presagiar lo que vendría.

Alemania ejerció el dominio territorial ante una Inglaterra que se vio asfixiada por el versátil planteo germano. Las insinuaciones alemanas se cristalizaron en el marcador luego de un pelotazo largo de Manuel Neuer que peleó Miroslav Klose con un defensor inglés. El experimentado delantero teutón hizo gala de su potencia, dejó en el camino a Matt Upson y definió, cayéndose, ante la salida de James (1-0, 20’).

Los dirigidos por Joachim Loew disfrutaron a continuación de un intervalo de contundencia y buen juego. A los 30’, una buena habilitación de Thomas Mueller dejó a Klose mano a mano con James, quien rechazó con los pies. Enseguida, una sincronizada combinación entre Oezil, Klose y Mueller, permitió un centro para Lukas Podolski, que ejecutó un zurdazo bajo que se metió por el medio de las piernas del guardameta (2-0, 32’).

Los ingleses apelaron a su orgullo y despertaron con actitud y fútbol. Lo tuvo Frank Lampard pero salvó de manera brillante Neuer. El descuento llegó tras un centro de Steven Gerrard, que cabeceó en forma precisa Upson (2-1, 37’). Los minutos finales fueron electrizantes con aproximaciones en ambas áreas, Gerrard incluso estrelló un tiro en el travesaño, y un ritmo vertiginoso.

Una diferencia inapelable

Inglaterra encaró el complemento con la firme decisión de igualar. Lampard sacudió otra vez el larguero de Neuer y todo parecía encaminarse a un empate. Pero los teutones de a poco nivelaron las acciones y dispusieron de una ocasión a través de Bastian Schweinsteiger, que salió por centímetros.

Y en una ráfaga de precisión y velocidad, los germanos liquidaron el pleito. En un contragolpe electrizante, Schweinsteiger habilitó a Mueller, que fusiló a James (3-1, 67’). Instantes después, Oezil inició un arranque endiablado desde su campo, se metió en el área y le sirvió el gol a Mueller, que la empujó el fondo de la red (4-1, 70’).

Los ingleses se vieron apabullados por la contundencia alemana e intentaron con pelotazos aislados sin profundidad. Sólo a través de una jugada colectiva entre Rooney y Gerrard, que sacó de modo providencial Neuer, pudo haber descontado.

Los minutos finales transcurrieron con la tranquilidad teutona y la desesperación de los Tres Leones, que debieron resignarse a armar las maletas.

Alemania, que avanza a los cuartos de final por 15ª vez consecutiva desde 1954 y ha estado entre los 8 mejores en 16 de sus 18 participaciones, jugará con el vencedor de Argentina-México, el 3 de julio a las 16:00 en el estadio Green Point de Ciudad del Cabo.

sábado, 26 de junio de 2010

Afuera los Yankis, adentro los negros


Ghana derrotó 2-1 a los Estados Unidos de América en tiempo extra, en un partido correspondiente a los octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA, y aseguró su primer pasaje histórico a los cuartos de final. El encuentro, disputado el 26 de junio en el Estadio Real Bafokeng de Rustenburgo, fue el primero en llegar a esta instancia y se definió con un nuevo tanto de Asamoah Gyan, el tercero en la competición.

Ghana salió muy decidida y con una idea de juego bien aceitada. No fue para nada extraño, entonces, que el marcador se abriera tan rápido. En una acción impactante de Kevin Prince Boateng, que arrancó en la mitad de cancha con balón dominado, el delantero sacó un justo derechazo que se metió junto al palo derecho de Tim Howard (0-1, 5’).

Los estadounidenses se vieron sorprendidos ante el orden ghanés y fueron completamente impotentes para poder tomar el balón y hacerlo circular con precisión. Los africanos pudieron aumentar en un tiro libre de Asamoah Gyan, que desvió el portero rival.

Ghana fue por momentos un auténtico festival de toques ante un rival maniatado que, sin embargo, tuvo una ocasión clara para igualar: a los 34’, Robbie Findley disparó y el guardameta Richard Kingson rechazó con los pies.

Kwadwo Asamoah pudo anotar con un zurdazo fuerte que Howard alejó con las piernas. La etapa concluyó sin variaciones y con un Ghana manejando el partido con autoridad aunque sin plasmarlo de manera concreta en el resultado.

Cambio de rumbo

El complemento exhibió un Estados Unidos con otra actitud, herido y con sed de dar vuelta las cosas. Al minuto nomás, tuvo una chance para igualar en un remate de Benny Feilhaber que manoteó de forma brillante Kingson.

Con agresividad y un Landon Donovan que tomó las riendas del partido, los de las Barras y Estrellas llegaron al empate, a través de un penal: una ejecución precisa de Donovan niveló el marcador (1-1, 62’). Fue el segundo remate desde los 12 pasos que anotó Estados Unidos en 60 años, luego del de Joe Maca ante Chile en Brasil 1950.

Los norteamericanos acapararon el balón y pudieron llevarse la victoria en dos acciones de Jozy Altidore, una que salvó Kingson y otra que se fue cerca del palo izquierdo. Pero el juego se fue diluyendo y el encuentro se encaminó al tiempo extra.

Un gol inolvidable

Ghana sacudió las mallas a poco de iniciar el tiempo extra, en una jugada en la que Gyan dominó de pecho y fusiló a Howard (1-2, 93’). Los africanos manejaron mejor el pleito ante un equipo estadounidense cansado y con pocas ideas.

El cotejo se hizo de ida y vuelta, de manera desordenada en muchos tramos y sin situaciones de riesgo para ambas porterías. Los ghaneses cuidaron la ventaja con todo lo que tenían y se llevaron un merecido premio, que ya se inscribió en la historia de su fútbol. Es el tercer equipo del continente que accede a cuartos de final, luego de Camerún (1990) y Senegal (2002).

En esa instancia enfrentará a Uruguay, que se impuso en primer turno a la República de Corea, el 2 de julio a las 20.30 en el Soccer City de Johannesburgo.

Uruguay el primero en Cuartos



En un partido vibrante, con muchas llegadas de gol, con dos equipos jugados a ganar, el equipo de Tabáres fue un poquito más porque definió bien en las pocas oportunidades que tuvo y por eso se fue victorioso.

Gracias a un encendido Luis Suárez, la “celeste” está otra vez en octavos como hace 40 años. La última vez que el equipo charrúa había llegado a los cuartos de final fue en el mundial de 1970. Hoy, nuevamente, gracias a las ganas y a la fuerza de un equipo agarrido, compacto, que hace la diferencia con sus dos delanteros, Luis Suárez y Diego Forlán, vuelve a estar entre los mejores 8 equipos del mundo.

El partido fue muy complejo, Corea fue un equipo duro, que nunca bajó los brazos, siempre fue para adelante, a pesar que fueron casi todo el partido con un gol abajo, intentaron en todo momento el empate. Lo encontraron tras varios rebotes, y seguidamente, tuvieron la oportunidad de la victoria con un remate que el arquero Muslera lo pudo controlar.

 Al equipo charrúa no le quedaba otra que salir a buscar la victoria, y tras una jugada magistral de su número 9, Luis Suárez, el héroe de la tarde, el conjunto del Presidente Tupac Amaru, Pepe Mújica, ganaba el encuentro y se ubicaba entre los mejores 8 del mundo.

Uruguay ganó bien, no fue su mejor partido, estuvo por momentos complicados, pero en un mundial los partidos deben ganarse como sea, y la celeste lo hizo. Ahora está en cuartos y festeja.

Pasaron con lo justo



España se impuso por 2-1 a Chile en el partido disputado en el estadio Loftus Versfeld de Tshwane/Pretoria el 24 de junio y terminó como primera del Grupo H de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010. Ahora se enfrentará a Portugal en octavos de final. La Roja sudamericana, por su parte, finalizó segunda y se verá con Brasil en la siguiente ronda, el mismo rival con quien ya enfrentó en Francia 1998.

Chile, como había prometido, salió a por el partido y asfixió el medio campo español. Presionó incansablemente la línea de creación del rival y puso en apuros la meta de Iker Casillas con una buena jugada de combinación en la Mark González no llegó a rematar el centro de Jean Beausejour  (11’) y con un remate de Marco Estrada (12’).

A España, que vistió de azul, le costaba mucho encontrar huecos y sufría con el marcaje correoso de los hombres de Marcelo Bielsa, quien logró tejer una maraña táctica agobiante, que sólo cedió ante un error del portero.

Claudio Bravo salió de su área, a la banda, para tapar la llegada de Fernando Torres y David Villa aprovechó el balón muerto para sacar un remate desde tres cuartos del campo que desequilibró el marcador (0-1, 24’). Así el delantero del Barcelona se convirtió en el máximo anotador de la selección española en Copas Mundiales.

Emoción y tensión


Chile no dejó de pelear y, de nuevo, Beausejour puso en apuros a Casillas con un remate desde el área chica que salió por centímetros. En la réplica apareció Andrés Iniesta para culminar con un remate raso una buena combinación con Villa (0-2, 37’). El jugador, que se perdió el partido contra Honduras por lesión, anotó el gol número 100 de Sudáfrica 2010. En la jugada, Chile perdió a Estrada por doble amarilla.

Tras el descanso, Bielsa metió a Esteban Paredes y Rodrigo Millar. El refresco no pudo ser más efectivo pues ya en el arranque, Millar remató un balón desde la frontal que, desviado involuntariamente por Piqué, recortó distancias (1-2, 47’).

La entada de Cesc Fábregas por Torres dio más dinamismo a España en la última línea, y el más beneficiado fue Villa que aún así no anduvo muy fino en la definición. Chile, aún con un hombre menos aguantó el ritmo del partido y siguió sin dejar que los españoles se sintiesen cómodos, incluso dieron algún susto a la retaguardia.

Al final, a sabiendas de que el resultado entre Suiza y Honduras beneficiaba a ambos, ambos equipos cuidaron su arco y terminaron celebrando conjuntamente la clasificación.

Empataron y se volvieron



Suiza y Honduras igualaron 0-0 en su último partido por la Copa Mundial de la FIFA, disputado el 25 de junio en Mangaung/Bloemfontein. Con este empate, ambas selecciones quedaron eliminadas de la competición en el marco del Grupo H.

La primera parte mostró a dos equipos muy cautelosos y con pocos argumentos de juego como para poder desequilibrar. Suiza, con la obligación de conseguir una victoria que les permitiese ilusionarse con acceder a octavos de final, salió un poco más que los catrachos.

Sin embargo, el balón circuló por la mitad de cancha durante la mayor parte del periodo. A los 11 minutos se produjo el primer disparo al arco defendido por Noel Valladares. Gokhan Inler remató al palo izquierdo y la pelota se fue por poco.

Seis minutos después, los helvéticos tuvieron otra ocasión para abrir el tanteador, tras un buen centro de Tranquillo Barnetta que cabeceó Reto Ziegler arrojándose hacia delante. El esférico salió por centímetros. Suiza avisaba cuál sería su forma de atacar.

Honduras, atado y controlado por el orden suizo, apeló al contraataque como único recurso para tratar de acercarse al arco defendido por Diego Benaglio. Los europeos, por su parte, merodearon el área catracha con pelotazos que buscaban a Blaise Nkufo.

Vallas invulnerables


La segunda parte transitó sin mayores diferencias. Los catrachos exhibieron mayor orden y combatividad para ir en búsqueda del desequilibrio, mientras que Suiza, desesperada, fue con todo lo que tenía en pos de la victoria.

El equipo centroamericano dispuso de una clara chance a los 52 minutos: David Suazo desvió, en forma increíble, un cabezazo cuando estaba solo ante el portero. La Nati contestó con una rápida acción en la que Barnetta se perfiló y remató, pero una vez más contuvo Valladares.

Con sus escasos argumentos, fue Honduras el que tuvo la más clara del encuentro en un disparo mano a mano que Benaglio, de manera brillante pudo detener. Y sobre el final, un centro venenoso no pudo ser conectado por Georgie Welcome a pasos de la línea de meta.

Ambos conjuntos quedaron fuera de competencia en el Grupo H sin poder sacarse ninguna ventaja y armaron las maletas sin cumplir el objetivo. Por eso, vuelven a casa.

viernes, 25 de junio de 2010

Del éxito al Fracaso, sin escala






El capitán de la selección de Italia, Fabio Cannavaro, asumió la responsabilidad del equipo tras el mal papel efectuado por la todavía campeona en la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 y reconoció que la situación debe cambiar.
Cannavaro afrontó su condición de líder del equipo tras la derrota ante Eslovaquia, que dejó al equipo en el último lugar del cuarteto. Y se marcha del Mundial sin conocer la victoria. "Fue nuestro peor partido. Nadie esperaba algo así para terminar la última ronda. Todo ha ido a peor", destacó el central italiano, y añadió que la fórmula tiene que cambiar.
"Cada país tiene sus problemas. Nuestro mecanismo tiene que cambiar. Basta con mirar a nuestros estadios y la cultura que ofrecemos cuando vemos un partido. Hay que pensar en los jóvenes. En nuestro fútbol tiene que cambiar. Si no, no ganaremos la próxima Copa hasta dentro de veinticinco años", exclamó Cannavaro.
Nueva era en la Azzurra
Sobre el adiós de Lippi y la incorporación de Cesare Prandelli como nuevo responsable dijo que "es bueno pero tendrá mucho trabajo" y reconoció que va a "tener que aplicarse en la fase de clasificación para la Eurocopa. Con partidos complicados. Es difícil. Hay poco donde elegir. El fútbol está hecho de los ciclos que crean las generaciones. La actual tiene buenos elementos. Pero no de primera fila", reconoció.
Cannavaro reconoció que el mazazo encajado ante Eslovaquia fue uno de los peores momentos de su vida. "Fue una de las peores noches. Nunca nadie hubiera esperado que el Mundial acabara de esta forma. Que termináramos últimos. Tanto por los resultados como por el juego desplegado", indicó.
No obstante, el capitán azzurro prefirió no dramatizar. "No creo que se algo que me marque este fracaso. No se puede olvidar lo que se hizo en el 2006. Ganamos con un equipo ya veterano por lo que no se pudo repetir el equipo. El entrenador ha tratado de hacer cambios pero no ha funcionado", dijo.




Para cumplir

Portugal y Brasil cerraron su participación en el Grupo G de la Copa Mundial de la FIFA con un empate 0-0, por lo que ambos equipos avanzaron a los octavos de final del certamen. El encuentro, disputado el viernes 25 de junio en Durban, enfrentó a un conjunto luso tranquilo por su buena diferencia de gol y un equipo sudamericano que reservó a varios de sus titulares.

El primer tiempo se jugó con total intensidad, tal como queda demostrado en las siete tarjetas amarillas que volaron por el aire. El conjunto de Carlos Queiroz apostó a la creatividad de Cristiano Ronaldo, quien se mostró activo pero poco resolutivo en esa mitad. Por el contrario, los pentacampeones intentaron progresar por la banda derecha gracias a las combinaciones entre Maicon y Daniel Alves.

Fue justamente el jugador del FC Barcelona el primero en buscar la portería contraria, pero su remate potente se perdió desviado. Menos suerte tuvo Nilmar, quien compartió delantera con Luis Fabiano: el atacante ingresó en soledad para conectar un centro por la izquierda, aunque su toque con destino de gol se estrelló en las manos de Eduardo y luego con el poste.

Corría media hora de juego y la tarde tomaba temperatura con el duelo personal entre Felipe Melo y Pepe, que volvía a jugar como titular tras una lesión que lo mantuvo seis meses alejado de las canchas. Sin embargo, Dunga, inteligente, sacó al volante central luego de que fuera amonestado en la primera mitad.

Maicon con un buen derechazo y Nilmar, que volvió a carecer de puntería, estuvieron cerca de anotar antes del descanso. No obstante, la más clara fue para Luis Fabiano quien, de cabeza, desperdició una situación inmejorable.

Sin emociones

La segunda mitad inició con un Ronaldo más activo y en búsqueda de sus propios espacios para aproximarse a Julio Cesar. De hecho, fue el protagonista absoluto de la única jugada seria de los lusos en el complemento: el jugador del Real Madrid tomó el balón en mitad de cancha y apiló rivales hasta ingresar al área. Allí perdió con Lucio, pero la pelota fue a parar a los pies de Raúl Meireles, quien de forma increíble falló su remate ante un arquero ya entregado.

A partir de allí, los brasileños monopolizaron el balón hasta los últimos minutos, aunque sin generar peligro en las narices de Eduardo. El arquero sólo tuvo que responder una vez, cuando el ingresado Ramires le exigió una volada notable para impedir la derrota in extremis.

No hubo tiempo para más. En octavos, Brasil enfrentará al segundo del Grupo H, mientras que Portugal hará lo propio con quien termine primero en esa zona.

Se despertaron tarde



Costa de Marfil venció 3-0 a la RDP de Corea pero no le alcanzó para acceder a octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010. El encuentro, disputado el 25 de junio en Nelspruit, significó la despedida para ambos conjuntos.

Los Elefantes salieron de inmediato a demostrar que su pretensión era anotar la mayor cantidad de goles posible y esperar una derrota de Portugal, para poder avanzar a la segunda fase. En el primer minuto, una buena habilitación dejó a Kader Keita solo frente al arquero que desvió con los pies.

Costa de Marfil mostró velocidad y precisión y asfixió por completo a los asiáticos, que no podían hacerse del balón y mucho menos avanzar con riesgo. Tanta superioridad hizo que el marcador no tardara en abrirse: tras una sincronizada combinación, Yaya Touré definió con clase, a colocar, al poste izquierdo del guardavallas (0-1, 13').

Los Elefantes no se conformaron con eso y siguieron buscando. Didier Drogba disparó un balón con violencia y reventó el travesaño, ocasión que aprovechó Romaric para ampliar la diferencia (0-2, 20')

La ambición de los africanos era desmedida y tuvieron otras dos oportunidades de convertir. A los 31, Keita ejecutó una volea espectacular pero la pelota se fue por encima del travesaño. Siete minutos después, Gervinho desvió un derechazo que se fue cerca del poste izquierda.

Otro gol que no alcanzó

La segunda parte continuó de la misma manera, con los norcoreanos imposibilitados casi por completo de poder salir de su campo y combinar jugadas. Los africanos, si bien bajaron la intensidad producto del desgaste producido en el primer tiempo, siguieron en la búsqueda de la valla adversaria.

A los 67 el tanteador estuvo por ampliarse en una acción de Romaric, que forzó una buena atajada del portero norcoreano. La diferencia se estiró tras un centro de Arhur Boka, que conectó Salomon Kalou (0-3, 81').

El final del encuentro mostró la impotencia de los marfileños, que sabían el resultado de Portugal - Brasil, y a los asiáticos con algunos movimientos aislados para acercarse al área. Fue el fin del recorrido para ambas selecciones, sin los resultados esperados.

Firmaron el empate



Paraguay empató 0-0 con Nueva Zelanda y le alcanzó para avanzar a octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 como ganador del Grupo F. Los Kiwis, en cambio, se vuelven a casa a pesar de terminar invictos. El encuentro se disputó el jueves 24 de junio en el Estadio Peter Mokaba de la ciudad de Polokwane.

Ambos equipos saltaron al campo de juego con esquemas similares: dos líneas compactas para defender y tres delanteros para atacar. La diferencia radicó en la manera de llevar el balón hasta posiciones ofensivas: mientras los paraguayos apostaron más al toque y a la rotación, y eventualmente utilizaron los pelotazos cruzados como una mera alternativa, los neozelandeses buscaron constantemente balones largos para sus atacantes.

A medida que sus volantes y puntas aceitaron los mecanismos de rotación, Paraguay fue adueñándose de la posesión de balón, aunque sin profundidad. Entonces, apenas si inquietó a su rival dos disparos de media distancia de su lateral derecho Denis Caniza, uno de Nelson Haedo Valdez, el más parejo de los sudamericanos en la etapa inicial, y otro de Oscar Cardozo.

Nueva Zelanda, mientras tanto, siguió con su libreto de no perder el orden, y más allá de apostar alguna pelota detenida, sólo hizo trabajar a Justo Villar en un par de centros cerrados que el arquero controló sin mayores problemas. El 0-0 con el que se fueron al descanso era un buen resumen del primer tiempo.

Sin goles pero con algunas emociones

Los Kiwis, no obstante, contaron con la primera gran oportunidad del complemento, cuando Simon Elliot recogió un rechazo corto de un defensor paraguayo a la entrada del área sobre la izquierda y elevó por poco su remate.

Sin embargo, esa jugada en el minuto 49’ pareció sacada de contexto, ya que rápidamente Paraguay retomó las riendas del desarrollo, aunque siguió sin encontrar los caminos hacia Mark Paston. Recién a los 62’ puso a prueba seriamente al arquero, que evitó la caída de su valla ante un remate desde corta distancia de Cristian Riveros a la salida de un córner.

Ambos entrenadores buscaron respuestas en la banca enrocando delanteros: Gerardo Martino puso a Edgar Benítez y Lucas Barrios por Cardozo y Haedo Valdez; Ricky Herbert a Chris Wood por  Rory Fallon. Los cambios despertaron a Paraguay, que presionó e hizo figura a Paston, quien le ahogó festejos a Benítez, a Barrios y a Roque Santa Cruz.

Si bien Nueva Zelanda quemó sus naves sobre el final, jamás inquietó realmente a Paraguay, que redondeó muy buena primera fase y espera ahora el desenlace del Grupo E para saber quien será su rival en el próximo martes 29 en Tshwane/Pretoria.

Eslovaquia enfrió el sueño Tano



Eslovaquia hizo historia al derrotar a Italia por 3-2 en el estadio Moses Mabhida de Durban el 24 de junio. Con este triunfo, los eslovacos eliminaron a los vigentes campeones del mundo de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 y clasificaron, en su primera participación en el torneo, a los octavos de final como segundos del Grupo F.

Marcello Lippi sabía lo que se jugaba, por lo que alineó de entrada a tres atacantes (Simone Pepe, Antonio di Natale y Vincenzo Iaquinta) y al todoterreno del centro del campo, Gennaro Gattuso. Eslovaquia también se sumó al juego ofensivo, aunque algo más fiel al esquema de los anteriores partidos.

Si bien los italianos se mostraron más sólidos desde el principio, Eslovaquia dispuso también de buenas oportunidades para inaugurar el marcador. Tras varias tentativas por mediación del goleador de la Serie A italiana, Di Natale y de su compañero en la punta, Iaquinta, llegó el gol de los centroeuropeos.

Era el minuto 25. Un error en el pase de Daniele De Rossi fue interceptado por Juraj Kucka, que asistió a Robert Vittek. El delantero eslovaco colocó el balón raso y pegado al palo, lejos, aunque por poco, del alcance de Federico Marchetti (1-0, 25’).

A la Azzurra le costó recuperarse del mazazo, y tardó más de 15 minutos en atacar con seriedad la meta defendida por Jan Mucha. Al filo del descanso, una volea desde fuera del área de Kucka a punto estuvo de ampliar la diferencia.

Con toda la artillería

Lippi no tardó en tomar decisiones drásticas. Tras el descanso, Christian Maggio y Fabio Quagliarella, compañeros en el Nápoles del capitán rival, Marel Hamsik, saltaron al campo, con lo que Italia quedaba con tres delanteros y un mediapunta. Con la entrada de Andrea Pirlo en el 55, gli Azzurri iban a por todas.

Di Natale, en el 62, sería el primero en poner en apuros a Mucha. Cinco minutos después, Quagliarella disparó a puerta vacía, pero Skrtel repelió el balón sobre la línea.

Eslovaquia volvió a avisar con una contraca en el 69, el Miroslav Stoch. Pero la bola iría dentro poco después, cuando Hamsik cedió por bajo para que Vittek, otra vez más, batiera a Marchetti (2-0, 73’). La campeona defensora, no obstante, no había dicho la última palabra. Di Natale aprovechó un rechace del meta eslovaco tras una buena combinación entre Iaquinta y Quagliarella (2-1, 81’).

Kamil Kopunek añadiría la puntilla de Italia en el 89, con un gol de vaselina tras un saque de banda (3-1, 89'). La honra de los de Lippi la salvó, aunque sólo en parte, Quagliarella, con un gol por la escuadra (3-2, 92').

De este modo, Eslovaquia obtiene el pase a octavos y espera rival, el primero del Grupo E, aún por decidir. Italia, por su parte, vuelve a casa sin haber logrado una sola victoria en la Copa Mundial de la FIFA 2010.

La naranja es digital


Con la esperada vuelta de Arjen Robben, Países Bajos derrotó 2-1 a Camerún y se adjudicó el Grupo E de la Copa Mundial de la FIFA, en el partido disputado el 24 de junio en Ciudad del Cabo. Los europeos dominaron en la etapa inicial, pero en la segunda los Leones Indomables, que ya estaban eliminados, habían emparejado las acciones y logrado la igualdad. El aporte del astro del Bayern Múnich definió sobre el final un pleito que tenía destino de empate.

El encuentro comenzó equilibrado y de manera intensa, pero fue Camerún quien tuvo la primera aproximación, cuando Aurelien Chedjou disparó mordido para que el arquero Maarten Stekelenburg dominara sin mayores problemas. Contestó enseguida Países Bajos con una jugada rápida que Robin Van Persie concluyó con un remate al medio del arco, que atajó Hamidou Souleymanou.

Ambos equipos mostraron movilidad y buen trato de balón aunque las ocasiones claras tardaron en llegar. Y fue la Oranje la que tuvo las posibilidades de mayor riesgo. Primero, con un tiro libre de Rafael Van der Vaart que embolsó el portero y luego en una acción veloz de Dirk Kuyt, quien quedó cara a cara y ejecutó un derechazo que salió cerca del poste derecho.

Cuando el encuentro se estancaba fue Países Bajos el que sacudió la red. En una sincronizada combinación entre Van Persie y Wesley Sneijder, el delantero del Arsenal inglés definió cruzado entre las piernas de Souleymanou (0-1, 36’). El equipo europeo se llevaba la diferencia que merecía por lo exhibido en la primera parte.

El cambio justo

El complemento mostró a los Leones Indomables con la decisión de ir en busca de la igualdad. Países Bajos tuvo la primera posibilidad de aumentar la ventaja en una corrida de Van Persie que concluyó con un disparo a las manos del guardavallas.

Los cameruneses no se resignaban a caer de nuevo y se acercaron cada vez más. A los 62 minutos, una buena habilitación dejó a Jean Makoun mano a mano con Stekelenburg, quien desvió el remate. Y de tanto ir, los africanos llegaron a la igualdad: Samuel Eto’o, de penal, empató con un tiro al palo derecho (1-1, 65’).

El técnico neerlandés hizo entrar a Robben para darle minutos en cancha, de cara a lo que se viene para la Oranje. La estrella mostró su intacta calidad y definió el partido en una jugada con su sello: en rápido contraataque, remató de afuera del área, la pelota se estrelló en el poste derecho de Souleymanou y le quedó servida a Klaas Jan Huntelaar, que la empujó al fondo de la red (1-2, 83’).

Países Bajos celebró una merecida victoria y los africanos se fueron del certamen perdiendo los 3 partidos de grupo por primera vez en su historia.

Por los octavos de final, Países Bajos enfrentará a Eslovaquia, segundo del Grupo D, el 28 de junio a las 16:00 en Durban.




Japón se subió a una Honda



Japón se aseguró la segunda posición del Grupo E tras derrotar a Dinamarca por 1-3 en el partido disputado en el Royal Bafokeng de Rustenburgo el 24 de junio. Los hombres de Takeshi Okada se enfrentarán a Paraguay en los octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010.

Dinamarca era quien necesitaba la victoria para hacerse con el segundo lugar del Grupo E, y sin embargo, el equipo que arrancó con más vocación de ataque fue Japón. La primera muestra fue una jugada de Makoto Hasebe que recibió un buen pase interior pero perdió el remate por centímetros. Dennis Rommedahl, uno de los jugadores más peligrosos de Dinamarca en este torneo, dio la réplica con un disparo cruzado que salió cerquita del poste.

Japón se adelantó pronto con un tiro libre que Keisuke Honda coló por el palo de portero que casi llega a rozar el esférico con la punta de los dedos (0-1, 17’). Jon Dahl Tomasson se perdió el empate cinco minutos después al no llegar por bien poco a rematar el balón bombeado al área nipona por Christian Poulsen.

La selección asiática apenas se inquietaba en las aproximaciones danesas. Controlaba el ritmo del partido y hasta se permitió aumentar la distancia en otro tiro libre que esta vez remató Yashuito Endo (2-0, 30’).

Kawashima se hace fuerte

Poulsen y Rommendahl trataron de reducir las diferencias pero el portero japonés no concedio tregua. Yuhichi Komano, rozando el larguero, y otra vez Endo, con un disparo lejano, todavía tuvieron tiempo de comprometer la meta danesa antes del descanso.

Tras el intervalo, a Dinamarca no le quedó otra que salir a por todas así que fue Eiji Kawashima, el portero japonés, el que más trabajo tuvo. Pero estuvo muy atento para atajar las entradas de Poulsen y algún tiro libre de Daniel Agger. Se salvó en un tiro al larguero de Soren Larsen, y hasta detuvo el penal ejecutado por Tomasson pero no llegó a tapar cuando el danés recuperó el rechace (2-1, 81’). Así el delantero del Feyenoord se convertía en el máximo anotador de Dinamarca en Copas Mundiales, con 5 dianas.

Pero Japón no estaba dispuesto a pasar apuros en la recta final y en un contragolpe sentenció con la diana de Shinji Okazaki (3-1, 87’) que establecía la mayor goleada de la selección nipona en Copa Mundial.

Además, con la clasificación para octavos Japón iguala su mejor actuación en el torneo, que fue en la edición de Corea/Japón 2002.